Con Chávez VENCEREMOS

jueves, 8 de diciembre de 2011

CELAC “Diplomacia de los Pueblos”


Por: 
  • Fundación Integración Comunitaria Suramericana y del Caribe (INTESUR).
  • Federación de Países Hermanos.
  • Fundación de Comunidades Organizadas del Sur en Acción.
  • Consejo Bolivariano de la Construcción.
  • Fundación Artistas del Sur.
  • Colectivo Marullo.
  • Organismo de Integración Motorizado de Venezuela-Zulia.
  • Teatro Arte de Maracaibo.


Nosotros Movimientos Sociales de las bases del poder popular:

Ante la abierta crisis decadente del sistema neoliberal capitalista en Estados Unidos y Europa; ante un mundo capitalista lleno de indignados sociales, ante la posición política de construir alternativas lógicas sociales, humanísticas, de valores y verdaderos derechos y defensa de la humanidad, la madre tierra y la soberanía de nuestros pueblos latinoamericanos y caribeños; ante la hegemonía controladora, avasalladora y parásita de los estériles organismos internacionales (todos creados por el imperio) y que por tantos años ignoran y sometieron social y económicamente a nuestros pueblos, aparentando supuestos planes de desarrollo, para explotarlos aventajadamente con “pañitos calientes”, vulgares y desiguales “tratados de comercio”, que no son otra cosa que el apoderamiento de nuestros recursos naturales y la usanza de Latinoamérica y el Caribe, como el patio trasero.
Ante verdaderas tesis probadas ya, de que: “un mundo mejor, si es posible”, y que las alternativas de cambio, están en plena revolución, para que nuevos mecanismos de integración para ese cambio revolucionario se expresen, cooperen y se beneficien entre si, sin la injerencia de los que “hasta ahora han trancado el juego”.
Ante los hechos sociales de abierto y desvergonzado intervencionismo en los pueblos, ante la manipulación política que ejercen los organismos internacionales, la descalificación a países progresistas y violación de todo tipo de leyes y derechos, calificando ellos: “que humanos tienen derechos y quien no los tiene” todo hipócrita y tendenciosamente a satisfacer sus antojos e intereses. Ante la indignación y repudio por las guerras y la lucha por la paz.
Ante la mirada consiente, despierta, atenta y esperanzada de los pueblos, las comunidades y movimientos sociales de las bases del poder popular; quienes estuvimos allí, entusiasmados pero no protagonizando, y que somos la esencia misma de la razón que desea y merece la transformación necesaria que ha dado origen a toda esta discusión y que en definitiva deberán ser los pueblos los beneficiarios directos de los logros socio políticos de estas transformaciones; acompañando con nuestro seguimiento, alegría, esperanza y presencia solidaria hasta donde se nos permitió en todos los actos públicos posibles de la cumbre de nacimiento de la CELAC; creación y nacimiento que nuevamente aceptamos como bastión de esperanza en la necesaria unión integral de Latinoamérica y el Caribe.
No dejamos sin embargo, de estar alertas, atentos y prestos a la lucha y participación, a la expresión del pensamiento crítico y constructivo de las realidades que nos afectan y encauzamos.
Para nadie, revolucionado y transformado en nuevo ciudadano o ciudadana hombre o mujer socialista, nada de lo que se planteo en la cumbre, de lo que dijeron los líderes y representantes de los países; ni siquiera el documento de cierre denominado: “Declaración de Caracas”  es nuevo. Todo lo dicho, lo que justifica la creación de la CELAC y lo plasmado en esa declaración, ya fue discutido y analizado desde hace mucho tiempo, ya lo planteó el libertador 200 años atrás y casi todos lo recordaron; ya lo hemos pensado, discutido y planteado los pueblos desde siempre en nuestras luchas revolucionarias desde hace años; ya existen por lo menos tres (03) o cuatro (04) organismos comunes con propuestas económicas, políticas y sociales similares; muchos de estos organismos nacieron también como mecanismos de esperanza y participación, pero lamentablemente han sido rápidamente absorbidos y congelados, por la comodidad burocrática y la “estandarización administrativa protocolar”, que impide la creatividad, la ejecución y participación de ideas y propuestas para consolidar el verdadero objetivo para el cual fueron creadas; y así mismo son fácilmente infiltradas sistemática y rapazmente por expertos burócratas anti integracionistas, luchadores pasivos pro yanquis y/o quintas columnas enquistados en las instituciones oficiales internacionales, dispuestos a blindar, frenar y dilatar la participación de la bases del poder popular, llámense movimientos sociales, comunidades organizadas, etc. Parasitas representaciones políticas trabajando muy intensamente para no hacer absolutamente nada, sino aprovecharse de la posición ejecutiva que el cargo representa, para coartar y cercenar “la medula” que haría funcionar una verdadera integración, que bien seria la que menos toman en cuenta todas estas organizaciones y organismos oficiales: “la diplomacia de los pueblos” .
Cualquier comunidad organizada Internacionalista e integradora, grupos o colectivos culturales o sociales, ambientalistas, etc., conocen muy bien que plantearle una propuesta integracionista, cultural, de intercambio, etc., etc., a la presidencia del Parlatino, o a cualquiera de sus acomodados diputados, a la Secretaría ejecutiva del Alba, o a cualquiera de las cinco (05) vicecancillerías que tiene la propia Cancillería Venezolana, es prácticamente “una verdadera quimera”; que la inoperancia activa de esta innecesaria burocracia, solo tiene mecanismos muy audaces y eficientes para dar respuestas negativas, infuncionales, mecanismos dilatorios, e informales, y que en la mayoría de los casos ni siquiera formalizan ninguna respuesta, obviando y frustrando las esperanzas de participación de las bases del poder popular, y ejerciendo toda acción contraria a tanta inversión, a la ideología integracionista y a la inclusión participativa de las comunidades y el pueblo; juegan abiertamente al desgaste de la participación popular, bien consientes en que han de suponer que: “si estamos del mismo lado, no tendremos capacidad de réplica, y que si replicamos, fácilmente nos tachan de contrarrevolucionarios o nos vetan” con la facilidad que les permite la jerarquía del cargo que ocupan, menospreciando el verdadero poder que nosotros mismos les hemos dado, para que nos lo devuelvan en veto, frustración y antítesis integracionista.
Creemos, sugerimos y estamos consientes de que con la creación de la CELAC, ha llegado la hora, en que se fusione en un binomio especial para la integración Latinoamericana y del Caribe, no tan solo los gobiernos, sino el Poder Ejecutivo con el Poder Popular, es decir, la participación real del pueblo, de las comunidades, organizaciones y movimientos sociales, para ratificar el Poder Soberano; que la participación real de integración venga también desde las bases y no tan solo desde la cúpulas políticas y de gobiernos, que en muchos casos confunden el poder popular que les ha dado el pueblo con la “comodidad inoperante burocrática” y que sumergidos en muchos casos también, en “múltiples ocupaciones improductivas” y contrarias a la integración y desarrollo social de los pueblos, actúan solo en la ejecución de: “LO URGENTE MATA LO IMPORTANTE”, desarticulando sistemáticamente a las bases, quedando éstas, imposibilitadas de participar.
Celebramos y aplaudimos la creación de la CELAC, pero con el alerta desde nuestras humildes trincheras de lucha, de las observaciones constructivamente críticas que aquí expresamos. Muy poco se logrará en la verdadera integración y segunda independencia, hasta que cualquier ciudadano, organización o movimiento de base del poder popular Latinoamericano y del Caribe, no tan solo sea beneficiado por las políticas y los planes de integración, sino que las ejecute directamente y participen también.
La Diplomacia de los pueblos” es un todo en la Integración, es una necesidad socio política compartida; integrarse, no debe de ser, ni seguir siendo una lucha para nadie, sino una facilitación entre los gobiernos y los pueblos, para el desarrollo entre los estados y sus comunidades; debe de ser puesta en la agenda de todos los tratados, organismos e instituciones, quienes debieran de plegarse al servicio de ella; y es en definitiva “La médula espinal de la Integración”.
Tenemos razones y motivos para celebrar el nacimiento de la CELAC, porque es la ideología compartida y solidaria de todas nuestras luchas; consideramos que es necesaria esta integración, complementariedad y unión de los pueblos Latinoamericanos y Caribeños; pero no podemos subestimar “al no invitado”; no dejemos de ser ingenuos, creyendo que Estados Unidos por no estar invitado, se va a perder esta fiesta; entendamos que “los lacayos pro imperialistas” están por todas partes, impidiendo, cercenando, oponiéndose y obstaculizando los procesos progresistas; entendamos que sus intereses desalmados están trastocados, y que sus tentáculos neo coloniales, están muy vigentes; no nos conformemos con el probado ÉXITO DE CONVOCATORIA a los 33 países, ni las mejores y buenas intenciones de los mismos.
Ejecutemos ya; es tiempo suficiente, un verdadero accionar de: “ensayo y error”; que cada organización de base del poder popular internacionalista y entendida de estos procesos de integración, participe, ejecute acciones, use la moneda virtual Sucre, bajo cualquier propuesta creativa de desarrollo e integración, plantee intercambios socio culturales, técnicos, educativos y políticos; que las Instituciones Internacionales Burócratas de los países, entiendan que los logros y políticas no son para ellos, sino para los pueblos mismos que representan; y que finalmente no sea la CELAC un cuerpo mas, secuestrado por la enfermiza burocracia, incapaz de dar ninguna respuesta; creadora de costosas y puras intenciones, que jamás logran preñar, mucho menos dar un parto; y que no termine defraudando el origen de su creación.


No hay comentarios:

Archivo del blog