Nuevamente el hospital Uyapar de Puerto Ordaz sale a la palestra publica, en este caso para hacer hincapié sobre un informe que ha venido circulando por ahí con soporte y todo; nada sobre supuestos; allí están los pagos, los montos y por supuesto las facturas. Esta la evidencia, mas claro no canta un gallo. Lo que falta aquí es abrir una investigación administrativa y sin dilación alguna ponerle la mano a los encausados.
Por un lado el gobierno Nacional ha venido cumpliendo con el articulo 83 de nuestra Carta Magna “La Salud del Pueblo Venezolano es un derecho social fundamental, obligación del Estado, que lo garantizara como parte del derecho a la vida” ; inyectándole ingentes recursos por recuperar y poner estas instalaciones al servicio del pueblo; pero por otro lado funcionarios inescrupulosos se valen de los mas disimiles mecanismos para chorearse esos recursos; pero lo mas infame es que la sociedad de cómplices que pululan en todos los estratos; son conocedores de estas anomalías e insisten en mantenerlos ahí.
Detengámonos dentro de esa marejada de facturas que existen por ahí, en algunas que con inescrupuloso cuidado los que elaboraron el citado informe han colocado como ejemplo. Nos encontramos con el pago por un servicio de fumigación, que ronda los 5000,00 Bs cancelado a una Cooperativa; le pagaron 18.000,00 Bs. Lo que llama la atención es que la mentada Cooperativa, no esta inscrita en Servicio Nacional de Contratistas y por ende no posee solvencia laboral. La ambulancia no escapa a esta andanada de corruptelas. Un mantenimiento normal, no sobrepasa los 2.000,00 Bs. El Hospital cancelo por este servicio 8.736,00 Bs. (Factura 1376 22/03/2011). En esta larga lista nos encontramos con la reparación de una camilla. Se pago 11.700,00 Bs. (Factura 0949 27/04/2011). Con este monto se compra una nueva y sobra real. La reparación de un aire tipo consola; se cancelo 7500,00 Bs. a la empresa Api 2001 (Factura 1383 30/03/2011). Con este dinero se compra uno nuevo. La reparación de una fotocopiadora a la cooperativa Sercon Guayana RL. Con este pago se hubiese, como en los casos anteriores, una nueva.
Dentro de este cumulo de irregularidades, que nada mas es un abre boca; se demuestra la incapacidad de la Directora; sino la indolencia contra una institución a la que el Estado le asigno para que cumpliera como un derecho social y fundamental; como señala la Constitución. Ahí esta las condiciones antihigiénicas en que se encuentra el tanque subterráneo de agua que surte de agua a la institución; cantidades de informes le llegan a la fulana Directora nada que hace. Esta anomalía puede reventar en una epidemia de pronósticos reservados.
El año 2010 fue un año de denuncias contra la Directora del Uyapar; donde una de ellas es el nepotismo; ahí se señala a su ex esposo, a sus hijos, sobrinos, con empresas prestando servicios dentro de estos recintos. Todo esto ha sido elevado, tanto publico y privado a otras instancias y nada que hacen por superar a estos lamentables procederes y desaguisados. Al parecer una sombra frondosa y grande la protege.
Desde esta columna va nuestro espaldarazo para el sindicato revolucionario y bolivariano de este Hospital; quienes sorteando dificultades, jugándose su estabilidad, están todo el tiempo rodilla en tierra, atento ante cualquier desliz o irregularidad; además de cumplir cabalmente con las responsabilidades para las cuales fueron electos se han convertido en unos “verdugos” contra una gerencia ladrona, corrupta e incapaz.
Luisroa519@gmail.com